¿Conoces las zonas erógenas de la mujer y el hombre?

Las zonas erógenas son aquellas que presentan una sensibilidad mayor al ser estimuladas. Esto se debe a que tienen una mayor concentración de terminaciones nerviosas. Hay que destacar que no solo se limitan a las zonas sexuales del hombre y la mujer. También es importante que cada persona es diferente y las sensaciones de excitación y placer pueden variar mucho.

Localizar estas zonas en tu pareja puede ser una nueva puerta a experimentar excitación y sensaciones muy placenteras. La confianza es muy importante para poder detectar dichas zonas en el cuerpo de nuestra pareja. Las caricias, roces con nuestra mano, piel o instrumentos como plumas, hielos o similares pueden llevarnos al clímax, incluso provocarnos el orgasmo sin necesidad de penetración. En el siguiente artículo de Sanitas, explica muy bien la importancia de las zonas erógenas en las relaciones sexuales

¿Qué se entiende como zonas erógenas?

Se ha creado mucho misterio sobre las zonas erógenas y su localización. Existen mapas de las zonas erógenas que nos identifican las zonas más sensibles. Pero nosotros vamos a hacer una clasificación en zonas primarias y zonas secundarias.

Las zonas primarias son aquellas que tienen una respuesta sexual muy alta. Principalmente en el hombre serían el pene y en el caso de la mujer sería el clítoris y la vagina. En algunos casos se incluye la zona de la próstata en el hombre al situarse el punto G del hombre.

Las zonas secundarias son aquellas que despiertan el apetito sexual pero no guardan una relación directa con el sexo. Suelen ser determinantes en los preliminares, ya que muchas personas se vuelven ultra sensibles si les activamos ciertas zonas erógenas secundarias.

Aprende a excitar: los puntos erógenos en la mujer

La uretra está situada entre el clítoris y la entrada de la vagina y suele pasar bastante desapercibida. Tiene menos poder que el punto G, pero su estimulación puede hacer disfrutar bastante a la mujer. También existe una zona rugosa dentro de la vagina a 7,5 centímetros de profundidad que su estimulación puede provocar orgasmos múltiples y un aumento de la lubricación.

La zona del cuello del útero también puede ser una zona altamente erógena. En esta última zona muchas mujeres sienten dolor al ser más estrechas o pequeñas. Aunque otras mujeres nos comentan que han conseguido sus mejores orgasmos. Un misterio todavía sin resolver.

El mejor consejo que se puede dar es no hacer las cosas de manera brusca y practicar la comunicación si se hace en pareja. Los órganos sexuales van conectados con otras partes erógenas del cuerpo que nos facilitan la estimulación si se tratan con cariño.

Los puntos clave para enloquecer a tu pareja ¿cuáles son los puntos erógenos del hombre?

La próstata es el equivalente del punto G femenino, su estimulación muchas veces se debe de hacer de manera interna. Es importante realizarlo con cuidado ya que podemos dañar la zona del ano. En nuestra web puedes encontrar juguetes prostáticos y lubricantes especiales para su estimulación.

Por otro lado, la zona que se encuentra situada entre el escroto y el ano, llamado perineo. Puede facilitar la estimulación del punto G del hombre. Se pueden lograr orgasmos muy intensos.

El sexo tántrico nos puede estimular ciertas zonas que están interconectadas entre el peno y la próstata. Está técnica suele abrir las puertas hacia un nuevo mundo de excitación sexual. Dentro del pene podemos encontrar varias zonas específicas que pueden provocarnos orgasmos en el hombre.

¿Son las mismas zonas erógenas para todos? 

Las zonas primarias erógenas suelen ser diferentes entre mujeres. Sin embargo, las zonas secundarias suelen tener aspectos muy en común en los dos sexos. Estimular simultáneamente estas dos zonas puede subir mucho la temperatura. El cuello, la oreja, los labios, incluso los pies son zonas que tienen muchas terminaciones nerviosas. Lo más importante es provocar una estimulación adecuada al gusto de nuestra pareja o de nosotros mismos.

¿Cómo aumentar la excitación?

Los preliminares y juegos en ciertas zonas erógenas aumentan la excitación para obtener noches inolvidables. No sólo nuestras manos pueden jugar un papel fundamental, también destacamos el ambiente donde la velas, la música, la temperatura, el olor, la higiene influyen.

No siempre hay que ir directamente hacia el acto sexual. Muchas parejas destacan que sus mejores encuentros se han producido a través de una cena romántica o una escapada donde el juego y la estimulación de ciertas zonas eróticas, los lleva a encuentros muy excitantes.

Es importante conocer las zonas erógenas de tu pareja y sobre todo las tuyas. El sexo es un campo muy amplio y que se puede mejorar conociendo nuestro cuerpo. Estas zonas con alto contenido de terminaciones nerviosas pueden provocarnos una excitación máxima en nuestro cuerpo. Logrando alcanzar el clímax y posteriormente el orgasmo.

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